El separador gravimétrico es el primer separador (S1). Aplica el efecto gravimétrico para separar el extracto en fracciones. Este separador se calienta a una temperatura establecida.
Cuando la mezcla de CO2 y compuestos químicos extraídos son dirigidos en esta separación, la temperatura y presión del solvente desciende gracias a la válvula de laminación. Con esta operación, el CO2 supercrítico se convierte en gas y pierde sus propiedades disolventes y así libera los solutos que, por efecto de la gravedad, caen al fondo del separador, listos para ser recogidos.
En este separador el operario recogerá todos los compuestos más pesados. Para eliminar los compuestos restantes, agua incluida, se deben realizar otras operaciones de separación con otros separadores.